La temporada estival 2010 de Mar del Plata entró en su tramo final. Si bien comenzó exitosamente, para esta época solamente los fines de semana se congregan miles de personas en distintos puntos de este principal centro turístico argentino. Este año no hubo crisis financiera pronunciada ni gripe A que demoliera las esperanzas de los empresarios dedicados al turismo, como sí ocurrió en el 2009. El 2010 inició pletórico para los operadores del sector y continúo con fuerza hasta hace unos días. A partir de entonces, la concurrencia de veraneantes comenzó a disminuir. Esto, según los análisis realizados por expertos en la materia, se debe a que el 1º de marzo comienzan las clases en gran parte del territorio argentino.
Para Daniel Suffredini, presidente de la Asociación Hotelera Gastronómica de Mar del Plata, la temporada “es buena, pero tampoco es como se dice por ahí”, en alusión a las cifras oficiales dadas a conocer por la Secretaría de Turismo bonaerense y el Emtur.
“Los balances mostraron cierta mejoría, pero el margen de ganancia no fue el esperado”, resaltó el empresario para luego destacar que el sector turístico tuvo una recuperación del 15 % respeto del año pasado y, además, destacó que en el 2010 se trabajó “menos que otros años porque la gente cuidó más su dinero”.
El verano pasado, además de la eclosión financiera el cambio horario fue una de las mayores quejas de los comerciantes porque los turistas se quedaban hasta altas horas de la noche en la playa. Recién emprendían el retorno a los hogares a las 21.
Este año, en tanto, el Gobierno desestimó esa medida en un intento por alentar el turismo y el comercio. Sin embargo, parece que no fue suficiente.
Fuente: El liberal
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